Colores suaves, luz natural, plantas de hoja perenne: así es como amueblar un rincón zen.
La palabra Zen significa literalmente "visión" y, en un sentido más amplio, "meditación". Su filosofía persigue la conciencia del espíritu, refrescando el alma. La búsqueda de la paz interior también puede pasar por el propio hogar, construyendo un rincón impregnado de tranquilidad e introspección. Aquí tienes algunas ideas para amueblar un espacio dedicado a la meditación y el cuidado personal construyendo un rincón zen
La habitación adecuada
Antes de diseñar el rincón zen de la casa, es necesario elegir la habitación adecuada : alejada de la calle, de sus posibles ruidos y bien iluminada por la luz natural del sol. No es necesario un espacio muy amplio, el mobiliario zen favorece las opciones mínimas y esenciales, inspiradas en el Feng Shui chino. Lo importante es sentir una primera sensación de bienestar al elegir una habitación determinada o un rincón determinado.
Los colores adecuados
El ojo también quiere su parte. Para crear un juego de luces armonioso y beneficioso, la elección de los colores es fundamental. Sería preferible evitar las lámparas artificiales, permitiendo que la luz solar irradie el área a través de grandes ventanales. Si no puede confiar en fuentes naturales, puede usar velas encendidas suavemente .
Los colores de la tapicería y los muebles deben recordar los colores suaves de los chakras, en particular el verde, el naranja y el amarillo. Un error a evitar es utilizar colores demasiado diferentes o una gran variedad de colores, lo que correría el riesgo de forzar la vista, anulando la paz de la habitación. El color que debe asegurar un mayor equilibrio cromático es el verde, que contiene tanto colores cálidos como fríos, con todas sus tonalidades.
Los materiales a utilizar
Para crear una perfecta armonía entre todos los elementos del rincón Zen, desde la luz hasta los colores, desde las decoraciones hasta las plantas, la elección de los materiales también es decisiva. La madera no da lugar a dudas en busca de la naturalidad, pero existen diferentes tipos. Si prefieres darle un toque más elegante, el wengué es la madera de elección.
Sin embargo, para recordar el color verde, el frakè da el tono adecuado a los muebles.
De los tonos más neutros, sin embargo, es la madera de arce la que combina armoniosamente con el amarillo y el naranja.
También puedes optar por piedra desnuda o ladrillos a la vista, colores no demasiado fuertes, para decorar las paredes.
Plantas de hoja perenne
Las plantas juegan un papel fundamental en la decoración del ángulo zen. De hecho, no solo representan un elemento natural que da luz a los ambientes, sino que su presencia calma el espíritu. Las plantas de hoja perenne son las recomendadas, como el enebro o el bambú. Por otro lado, conviene evitar aquellas que sean demasiado fragantes, cuyo olor podría resultar nauseabundo.
La filosofía Zen también centra su atención en una planta en particular: el bonsái. Los pequeños árboles en miniatura, de hecho, a pesar de su diminuto tamaño, conservan el poder de la naturaleza, incluso en una sala de estar o en un rincón de la casa.
Agua, un elemento indispensable
El simbolismo ligado al elemento agua afecta a diversas culturas, en este caso representa el paso del tiempo y las continuas transformaciones. El plácido y reconfortante rugido del agua otorga un sonido relajante, armonioso y circular.
En tu rincón zen, puedes insertar una pequeña fuente zen, también con luces LED integradas, que acompañará la meditación.
El fuego de las velas
Todos los elementos de la naturaleza tienen su importancia, incluso el fuego. Enriquecer tu rincón Zen con velas con tu perfume favorito hará que el aire sea más agradable. Incluso las linternas pueden irradiar la habitación, brindándole una luz suave y tenue. Alternativamente, puedes usar incienso perfumado o dispensadores para ambientes que no chocan con el resto de muebles, como los cubiertos de piedra.
Las campanas tibetanas
Por último, pero no menos importante, las campanas tibetanas acompañan los sonidos de tu rincón zen. Gracias a su capacidad para reproducir la sílaba OM armonizadora , son indispensables para completar la meditación, ya sea que los golpees con el gong o los frotes con un palo. Y no solo eso: representan un adorno que encaja a la perfección en el rincón zen.
Qué comprar
- Después de elegir el espacio adecuado, aquí hay una lista de cosas que comprar absolutamente para el rincón zen: porta incienso de latón o piedra
- Jarrones zen de varias formas y tamaños para alinear que podrían convertirse en porta flores
- estatuas pequeñas o en cualquier caso no demasiado voluminosas.
Otra idea podría ser arreglar un jardín zen en miniatura, con arena o piedras, para mover y dar forma en momentos de relajación.
Para ambientar, las lámparas de sal se pueden colocar en el suelo de tu rincón zen. O, de nuevo, las lámparas de bambú podrían dar el toque final.
Por último, para un toque personal, si tienes la posibilidad, podrías recolectar piedras de varios tamaños para decorar una pequeña mesita de noche o estantería en tu rincón Zen.
Rincón zen: imágenes y fotografías
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