Plantas pequeñas, de origen andino. Tienen un tallo globular que se desarrolla volviéndose cilíndrico, con costillas rectas y crestas de las que se ramifican mechones de espinas casi siempre muy largas y suaves. En el ápice de la planta, generalmente brotan múltiples flores en forma de tubo, rojas, rosadas o amarillas, con muchos pétalos puntiagudos que se curvan hacia afuera.
FLORACIÓN: Florecen en otoño.
LUZ: Deben colocarse para disfrutar de un buen brillo, sin embargo, es mejor filtrar la luz solar directa.
AGUA: Necesitan pocos pero regulares riegos. Temen el estancamiento del agua.
TEMPERATURA: Son plantas delicadas: toleran bien temperaturas bastante bajas (4-7 ° C), pero solo si la humedad es escasa.
ABONO: Durante el período vegetativo proporcionar abono específico para plantas suculentas, diluido con el agua de riego.
CONSEJOS: Utilice un sustrato compuesto de tierra de hojas y arena. Son de crecimiento lento, por lo que no es necesario trasplantarlos con frecuencia. La multiplicación ocurre por semilla, en primavera.
CURIOSIDAD: Planta originaria de Chile, muy apreciada por sus flores, muy hermosas y ornamentales, de vivos colores.